La Cabanya del Mir

La Cabanya del Mir es un auténtico hallazgo en medio de la naturaleza, en Mas del Mir, Santa Maria de Besora. Este restaurante, ubicado en una antigua masía rural, te invita a disfrutar de su ambiente acogedor y las espectaculares vistas que ofrece, especialmente del famoso salto del Mir. La comida es su punto fuerte: servida solo a la carta, aquí encontrarás 42 platos de cocina española que te harán sentir como en casa. Si buscas un lugar donde relajarte y comer bien, este es el sitio.

Abierto de jueves a domingo, es el destino perfecto para un buen desayuno o comida, y si planeas una cena, solo necesitas hacer una reserva para grupos. La atención es sobresaliente, con personal amable como Miguel que se asegura de que tu experiencia sea memorable. Así que si estás buscando una escapada gastronómica en un entorno idílico, La Cabanya del Mir es una opción a considerar.

Dónde se encuentra La Cabanya del Mir

¡Hey, amigo! Si estás buscando un lugar con encanto para comer, La Cabanya del Mir es una parada obligatoria. Este restaurante de gestión familiar se encuentra en Santa María de Besora, en plena comarca de Osona, Cataluña. La atmósfera aquí es simplemente mágica; está en una masía tradicional catalana que te hará sentir como si hubieras retrocedido en el tiempo. ¡Y hay dos chimeneas que crean un ambiente cálido y acogedor, perfecto para cualquier época del año!

Ahora, hablando de comida, ¡prepárate para disfrutar! La especialidad de la casa es la cocina casera catalana, y déjame decirte que la cola de buey y el tuétano de res son un verdadero festín. Si te gusta la tradición, no puedes perderte el vino servido en porrón, algo que le añade un toque auténtico a tu experiencia. Ah, y para los amantes del dulce, también tienen moscatel servido de la misma manera. Simplemente, ¡es una delicia!

Eso sí, ten en cuenta que cuando el lugar se llena (lo cual pasa con frecuencia, especialmente los fines de semana), el servicio puede ser un poco más lento. Algunos dicen que el personal se ve un poco desbordado con grupos grandes, pero, sinceramente, ¡la comida está tan buena que eso no afecta la experiencia! Para que todo sea más fácil, te recomiendo hacer una reserva previa.

Además, si eres de los que ama estar en contacto con la naturaleza, ¡estás de suerte! Desde La Cabanya del Mir, puedes empezar una ruta de senderismo que te llevará al Salt del Mir, una espectacular cascada de unos 20 metros de altura. El recorrido es muy llevadero, así que en unos 20 minutos estarás disfrutando de vistas increíbles.

Y no te preocupes por dónde dejar el coche porque tienen estacionamiento gratuito. Pero ojo, en días muy concurridos, puede que encuentres el aparcamiento un poco limitado, así que mejor llega con tiempo.

En resumen, La Cabanya del Mir es un sitio que combina una experiencia gastronómica auténtica con un entorno natural impresionante. Todo esto lo encuentras en Mas del Mir, 08584 Santa María de Besora, Barcelona. Así que, ¿a qué estás esperando? ¡Ve y disfruta de una comida riquísima! #LaCabanyaDelMir #GastronomíaCatalana #CocinaCasera

Qué tipo de establecimiento es La Cabanya del Mir

No hay nada mejor que pasar una buena mañana disfrutando de una comida en La Cabanya del Mir. La otra vez, pedimos rabo y carrilleras para hacer un almuerzo a media mañana, y la verdad, ¡estaban buenísimos! Vino con una guarnición de judías blancas salteadas y pan de Pagés que complementaron perfecto los platos. Optamos por comer en la terraza al sol, y aunque el ambiente estaba relajado, nos sentimos super a gusto. Me sorprendió el servicio, que aunque podía haber sido un poco más ágil, la comida lo compensó. En total, le damos un 5 estrellas a la comida, un 4 al servicio, y un 4 al ambiente. En verdad, muy recomendable.

Pero no todo fue miel sobre hojuelas. Una familia que estaba cerca de nosotros tuvo una experiencia horrible. Eran nueve personas con una mascota y se sintieron totalmente ignorados. Después de que les limpiaran la mesa, pasaron más de 10 minutos sin que nadie les atendiera. Es comprensible sentirse frustrado, y más cuando el chico que se acercó parecía más interesado en arreglar los manteles que en servirles. ¡Imagínate que el tipo hasta dijo que si el perro le mordía le daría un golpecito en el hocico! Eso sí que no se hace. Por su experiencia, le dieron un 1 estrella al servicio y se fueron, lo que me parece muy injusto para un lugar con tanto potencial.

Al parecer, esto último no es un caso aislado. Hay quienes también han notado que, aunque el lugar y las vistas son espectaculares, el servicio deja mucho que desear. Hasta mencionaron que te traen cosas que no pides, como el pan, y terminas pagando de más. Así no hay forma de que te sientas cómodo, y entiendo por qué se irían a buscar otra opción. En fin, es complicado porque, a pesar de las quejas, la comida tiene buena calidad y la atención puede ser genial en algunos momentos.

Entonces, ¿qué tipo de establecimiento es La Cabanya del Mir? Pues, se presenta como un restaurante de cocina tradicional de masía, donde puedes disfrutar de platos locales y carne de caza en un ambiente rústico y acogedor. Con una buena ubicación junto a la pista para senderismo, es un lugar que promete una experiencia agradable, pero que necesita un poco más de trabajo en su servicio al cliente. Si pasas, asegúrate de reservar y disfruta de esa terraza exterior, ¡te va a encantar!

Qué tipo de comida se ofrece en La Cabanya del Mir

La verdad es que La Cabanya del Mir nos dejó a todos impresionados el viernes pasado. Fuimos a comer allí en familia, mis hijos, mi pareja y yo, y fue todo un acierto elegir este lugar. Está en un sitio ideal, con vistas increíbles que realmente complementan la experiencia. La comida es de 5 estrellas, bien preparada y deliciosa. ¡El servicio también es excepcional! Personalmente, destacaría la atención de Miguel, que fue súper amable y atento, un verdadero 10 en hospitalidad. Sin duda, cuando volvamos a la zona, será nuestra primera opción.

Por otro lado, la camarera brasileña, Maikel, también merece un aplauso. Siempre tenía una sonrisa y nos trató de maravilla, al igual que María. Te hacen sentir como en casa, lo que es un plus en cualquier restaurante. Todos los platos que pedimos fueron impresionantes. El trinxat estaba delicioso, con una cansalada que estaba para chuparse los dedos, y esas albóndigas... ¡ni te cuento! Además, no hay que olvidar el flan de mato, que estaba de escándalo, y la crema catalana que es una maravilla. Con esos sabores, ¡ya tenemos ganas de repetir!

Aunque escuchamos alguna que otra crítica sobre el servicio en momentos de alta afluencia, nuestra experiencia fue súper positiva. En un restaurante tan concurrido es normal que a veces haya un poco de espera, pero la comida casera y sabrosa y el ambiente acogedor compensan cualquier pequeño contratiempo. Es un típico masía catalana en un entorno natural alucinante, ideal para disfrutar de un buen día al aire libre y hacer una parada si estás de ruta en bici o moto. Siempre está lleno, ¡pero eso solo habla de lo bueno que es!

En cuanto al tipo de comida que ofrecen en La Cabanya del Mir, se centraron en platos típicos catalanes, con la esencia de la comida casera de la abuela. No esperes una carta muy extensa, pero está llena de esas delicias que todos conocemos y amamos, como trinxat, albóndigas y postres caseros que son un verdadero regalo. Y lo mejor de todo, el precio es muy razonable, así que no hay excusa para no darle una oportunidad, ¡es un sitio al que querrás volver una y otra vez!

Cuántos platos hay en el menú de La Cabanya del Mir

Y hablando de La Cabanya del Mir, la verdad es que es un lugar que tiene su encanto. Esta masía de 1864 está en una ubicación genial, rodeada de plena naturaleza, lo que la convierte en un sitio perfecto para aquellos que buscan escaparse del bullicio. Sin embargo, no todo es color de rosa. He oído de gente que ha tenido experiencias muy fuera de lo normal con el servicio. Por ejemplo, un conocido se fue sin comer después de esperar más de 30 minutos solo para que le pusieran un mantel. ¡Increíble! La paciencia tiene sus límites, ¿verdad?

Por otro lado, también hay quienes han disfrutado de la comida. La verdad es que los platos están bastante bien, sobre todo si te gusta la comida casera. A muchos les gustaron el carpaccio, la sopa torrada y el flan de mató que mencionan como un must. Eso sí, si te toca el 'camarero-propietario' equis, prepárate, porque algunos dicen que es bastante nefasto en cuanto a atención. No sé vosotros, pero yo no volvería a un lugar donde el servicio sea un drama.

A pesar de todo esto, el ambiente tiene su personalidad. Se siente acogedor, con esa chimenea de piedra que te hace sentir como en casa. Siempre es agradable comer al lado de una chimenea, especialmente en esos días fríos en los que apetece un plato caliente. Y no olvides dar un paseo por el Salt del Mir, a solo 30 minutos a pie; la paz y la tranquilidad que se respira ahí son una maravilla.

Para responder a la pregunta de cuántos platos hay en el menú de La Cabanya del Mir, la verdad es que no tengo la cifra exacta. Pero, por lo que he leído, parece que hay varias opciones ricas en la carta, así que tal vez sean alrededor de 10 a 15 platos. Al final del día, es un lugar con sus altibajos, pero da gusto descubirlos por uno mismo.

La comida se sirve solo a la carta en el restaurante

La experiencia en La Cabanya del Mir fue un poco agridulce, ¿verdad? Esa mujer de pelo rizado tiene una personalidad que no pasa desapercibida y, aunque el ambiente del lugar es distinto al de la ciudad, puede que eso influya en la manera en que te tratan. Tuvimos reserva a las 14:30, y hasta las 15:15 no nos ofrecieron una mesa ni se preocuparon por nuestra llegada. La carta es bastante corta, pero te aseguro que todo lo que probamos estaba delicioso y hecho en casa. Chicos, ¡los camareros merecen una mención especial! Estuvieron siempre amables y resueltos, y ese chico mayor, no sé cómo lo hace, pero es un crack de cara al público. Se nota que disfrutan lo que hacen, y eso se siente en el ambiente.

El lugar tiene un encanto especial, y como muchos saben, está cerquita del salto del Mir, una maravilla de la comarca de Osona. Si estás planeando ir, haz una reserva, porque se llena rápidamente. Me sorprendió un poco que no tienen menú físico; simplemente te cantan los platos y tú eliges. Así que prepárate para alguna sorpresa en la cuenta, ya que no tienes idea de los precios antes de pedir. Aunque el trato fue correcto, me dio la impresión de que había un poco más de confianza con los clientes habituales. Pero la comida… ¡eso sí que es espectacular! Probar la esqueixada de bacalao, el carpaccio de ternera, el rabo de toro, y la butifarra fue una delicia. No te olvides del flan de mató y ¡ese postre especial que parecía un sueño de chocolate y caramelo!

Si te pasas por ahí a desayunar, también tienes una buena variedad de platos de cuchillo y tenedor, como carne a la brasa y callos, acompañados de judías con tocino y pan con tomate. Y mientras degustas un porrón de vino, puedes disfrutar de las vistas y hacer alguna excursión fácil a los alrededores. El ambiente es ideal para ir sin prisa y disfrutar del buen comer y la naturaleza. En cuanto a la pregunta de si la comida se sirve solo a la carta, efectivamente, ahí la cosa va así: te cantan los platos y tú haces tu elección, así que prepárate para un pequeño juego de sorpresas. ¡Definitivamente un sitio recomendado al cien por cien!

Cuáles son los horarios de apertura de La Cabanya del Mir

Y hablando de La Cabanya del Mir, no puedo dejar de mencionar lo bonito que es el lugar. Imagina estar rodeado de prados y montañas mientras disfrutas de una buena comida casera. Es una antigua masía rural, así que tiene ese toque rústico y acogedor que tanto nos gusta. Además, es el punto ideal si quieres hacer una parada después de ver el Salt del Mir, ¡realmente espectacular! Si te gusta la comida tradicional, aquí vas a estar en el paraíso, te lo aseguro.

La carta es breve, pero está diseñada para hacerte salivar. Por ejemplo, yo probé unos guisantes salteados con setas, aunque, como siempre, no pude evitar comentar que deberían ser hervidos y crujientes. Y ni hablar de los platillos principales, ese bistec enorme que pidió mi acompañante, aunque le sugerí que mejor lo pidiera al punto, ya que tiende a pasarse un poco. Yo opté por el cabrito salteado con ajos tiernos, que estaba de rechupete, acompañado de alubias y panceta. Y claro, ¡no se puede ir sin un buen postre! La crema catalana es un must.

Un detalle a tener en cuenta es cómo llegar, hay que tener precaución. La carretera es privada, así que solo puedes acceder si eres cliente o vecino. Si no, mejor aparca en el pueblo y haz un pequeño paseo; son solo 30 minutos caminando y lo vale. Además, hay que ser respetuosos con el entorno y tampoco dejar basura por ahí. Al final, lo que más me encantó es que admiten perros pequeños-medianos dentro, así que puedes llevar a tus peludos sin problema.

¡Ah! Y sobre los horarios de apertura, el restaurante suele estar abierto de jueves a domingo, pero sería bueno que llames antes para asegurarte. Más que nada, ¡hay que disfrutar de la buena comida sin contratiempos!

Qué días de la semana está abierto el restaurante

Así que, después de charlar un poco sobre la experiencia que tuvimos en La Cabanya del Mir, no puedo evitar decir que es un lugar muy especial. Te queda a solo media hora andando de la cascada del Mir y su famoso puente románico, así que si buscas un plan con buenas vistas y comida, este es el sitio. Las opiniones sobre su menú son unánimes, y la carne a la parrilla tiene una pinta increíble. Si eres fan de la buena comida, te aseguro que saldrás con una sonrisa en el rostro.

Hablando de comida, no puedo dejar de mencionar la guarnición de garbanzos que nos sirvieron. ¡Estaban exageradamente buenos! En serio, si estás leyendo esto y eres uno de los dueños, ¡compárteme la receta, por favor! La experiencia culinaria es de 10, y la mejor parte es que puedes disfrutar de una vista de ensueño mientras comes. De hecho, el precio por persona está entre 30 y 40 €, lo cual me parece bastante razonable considerando la calidad.

En cuanto al ambiente y el servicio, la verdad es que el camarero que nos atendió era un encanto. La única pega que puedo ponerle es que tardaron un poco en atendernos. Pero una vez que los platos llegaron a nuestra mesa, la espera se olvidó rápidamente. Las galtas de cerdo guisadas y los pies de cerdo a la brasa estaban de escándalo. Sin lugar a dudas, repetiremos seguro.

Claro, no todo fue perfecto... Hubo una pequeña experiencia un tanto negativa con un café que pedimos al volver de una caminata. Aunque el precio a veces puede parecer excesivo, yo diría que vale la pena ir, siempre y cuando no te toque un servicio que te deje con mal sabor de boca. Y es que hay que recordar que el trato calidad-precio en la mayoría de las ocasiones es más que razonable: 25-35 € es un precio normal por una buena comida aquí.

Y si estás pensando en ir, te estás preguntando qué días está abierto el restaurante, ¿no? La buena noticia es que puedes visitarlo casi toda la semana. ¡Así que ya tienes plan!

Es necesario hacer una reserva para cenar en La Cabanya del Mir

La verdad es que si estás buscando un lugar acogedor y rústico para disfrutar de una buena comida en plena montaña, La Cabanya del Mir es el sitio ideal. La chimenea crea un ambiente tan cálido y agradable que te sientes como en casa desde el primer momento. La comida es excepcional; los platos son caseros y riquísimos. Si te decides por el entrecot, ten por seguro que vas a disfrutar de una experiencia increíble, ¡es en serio uno de los mejores! Y si eres amante de los aperitivos, el carpaccio y la escudella también son imperdibles.

La atención del personal es generalmente bastante buena; aunque hubo un momento en que un grupo se sintió un poco decepcionado con el trato, no creo que sea lo usual. Yo he tenido una experiencia fabulosa, hasta comiendo en un día rejugado como fue el desayuno. Por unos 10-20 € puedes disfrutar como un rey, así que no se puede pedir más, ¿verdad?

Y si de aparcamiento hablamos, ¡ni te preocupes! Hay aparcamientos gratuitos en las cercanías, así que no tendrás que andar dando mil vueltas buscando un lugar. Eso sí, si planeas quedarte para cenar, lo mejor es hacer una reserva. Aunque hay plazas disponibles, para asegurarte que tendrás tu mesa lista, es una buena idea llamar y confirmar. Así no habrá sorpresas, y podrás dedicarte a disfrutar de esa excelente experiencia gastronómica que tienen para ofrecerte. ¡Nos vemos en La Cabanya del Mir!

Qué tipo de ambiente se puede esperar en La Cabanya del Mir

¡Ya estamos de vuelta! La Cabanya del Mir, en Mas del Mir entre Santa María de Besora y Vidrá, es definitivamente un lugar que vale la pena explorar, aunque hay que admitir que el camino de arena puede hacerte pensar dos veces. Pero, en serio, ¡no te desanimes! llegas a un sitio con 5 estrellas en la experiencia general, así que si me preguntas, merece la pena el viaje y el pequeño esfuerzo.

Nosotros fuimos cuatro amigos un domingo y, la verdad, disfrutamos mucho el momento. A diferencia de otros lugares, aquí no tienen menú; sólo carta, lo que hace que las opciones sean más amplias. Y lo mejor de todo son los precios, perfectos para lo que ofrecen, que es una calidad de comida tremenda. Pero bueno, también hay historias no tan agradables, ¿verdad? Un comentario sobre la atención de la camarera que nos hizo sentir como si estuviéramos molestando, y eso es algo que puede arruinar la experiencia un poco. ¡Así que el consejo es ir con reserva!

Si decides aventurarte, hay que estar preparado para algunas decepciones también. Un amigo pidió pota i cap de xai y la tuvo que devolver porque estaba pasada. ¡Vaya faena! Y la verdad, alguno de sus platos parecía ser más freezer que cocina. Pero si quieres algo realmente rico, no dudes en probar el vermut con aceitunas; eso no falla. Aunque hay platos que son un poco arriesgados, hay otros como el rabo de toro o el jabalí que son bastante exitosos, así que tal vez podrías ir con eso en mente.

En cuanto al ambiente, espera algo bastante auténtico y rústico. Podría llamarse 'taverna de pueblo', con esas paredes que cuentan historias y un aire tradicional que en verdad te hace sentir parte de lo que es. Como amante de la buena comida y un buen trato, puedo decirte que la experiencia en sí es un reflejo de la simplicidad del lugar: fresco, acogedor, y enfocado en lo esencial. Aun así, te recomiendo que lleves buena onda y quizás incluso un poco de paciencia, porque el servicio puede variar. Definitivamente tendrás buena comida por un precio justito, en un lugar donde los detalles son la clave. Así que, ¿te animas a visitar La Cabanya del Mir?

Qué vistas se pueden disfrutar desde La Cabanya del Mir

Y si estás buscando un lugar donde realmente se sienta el calor de la comida casera, La Cabanya del Mir es tu sitio. Imagínate empezar el día con un buen desayuno en su bar, disfrutando de la tranquilidad que ofrece. Aquí la comida es de buena calidad, y aunque el servicio es un poco lento y no se estresan, la verdad es que la espera vale la pena. Te vas a querer quedar a probar todo lo que ofrecen.

Desde ahí, también se puede organizar una ruta de senderismo súper interesante, lo que hace que sea el plan perfecto. Al terminar de comer, puedes calzarte las botas y salir a explorar los alrededores. Aunque no vayas a hacer una ruta larga, un caminito bien bonito siempre es un buen pretexto para hacer un poco de ejercicio después de esa buena comida.

Y, hablando de esas vistas... Desde La Cabanya del Mir puedes disfrutar de unas panorámicas espetaculares. Imagina contemplar los vales y montañas de la zona de Santa Maria de Besora mientras te relajas con tu café. La belleza del paisaje te quita el aliento, especialmente si te sientas en la terraza. Ideal para tomar unas fotos y compartirlas en tus redes, ¡porque no hay mejor manera de recordar un día increíble!

Fotografías La Cabanya del Mir